«Resistencias y proyectos emancipatorios en América Latina y el Caribe” fue el nombre de la clase abierta que dictaron ayer, expertos de cuatro países, entre ellos Isabel Pipper, coordinadora del PSM de la U. de Chile, y en la que se buscó explorar las articulaciones entre memorias colectivas y luchas políticas, resistencias y proyectos emancipatorios que tienen lugar en nuestra región en el presente.

“La memoria es un proceso y producto social, político y cultural, a través del cual se dota de sentido a las historias personales y colectivas y pensamos que eso se hace siempre desde las condiciones del presente. Es decir, es el presente, es en el ahora, donde hacemos memoria”, dijo Isabel Pipper, académica de la Universidad de Chile y coordinadora del Programa de Psicología Social de la Memoria (PSM) al iniciar su intervención en la clase abierta: “Resistencias y proyectos emancipatorios en América Latina y el Caribe”, realizada ayer por el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso).
En la actividad participaron como profesores cuatro destacados expertos en el tema de América Latina: Isabel Piper (Universidad de Chile), Ana Cacopardo (Universidad de Lanús, Argentina), Marisela Montenegro (Universidad Autónoma de Barcelona, España) y Alejandro Castillejo (Universidad de los Andes, Colombia).
La clase, que fue transmitida en vivo a través del canal de youtube de CLACSO tuvo más de 2 mil asistentes y puede revisarse en el siguiente enlace:

Frases destacadas Isabel Pipper:
“La memoria colectiva es una acción situada, relacionada con el contexto social y político en el que se produce, y que es constructora de imaginarios, de relaciones, de sujetos y subjetividades”.

“Entendemos que estudiar, investigar, analizar y hacer memoria colectiva es siempre una estrategia de construcción de significados sobre el pasado que está al servicio de la construcción del presente”.

“Estamos siempre alerta acerca de las articulaciones entre memoria y las relaciones de poder… Eso nos ha llevado a ser críticos con aquellas políticas públicas de memoria que buscan establecer memorias únicas y consensuadas que hegemonizan los recuerdos y a los sujetos. Y también hacer crítica de las políticas de memoria que se enfocan solamente en la experiencia de violación de los DD.HH. de algunas víctimas, dejando afuera las memorias de luchas y resistencias”.

“Las memorias globalizadas leen la figura de la víctima con las que amplios sectores de la sociedad se sienten cómodos. Muchas veces estas versiones silencian los proyectos políticos que hay detrás e invisibilizan las resistencias”.